Continuamos en este número la serie que iniciamos en el anterior sobre los actuales hallazgos y expectativas de la moderna investigación educativa. Esta serie ha sido preparada y publicada por la institución Down Syndrome Education International.
La escritora Martha Beck, con su vivo, enérgico y directo lenguaje, nos ofrece su personal visión y experiencia en la crianza de su hijo Adam. Muchos recordamos su insuperable bestseller “Expecting Adam”, en el que relata la titánica defensa que hubo de hacer de la vida de su hijo engendrado mientras cursaba su doctorado en Harvard. En este artículo atina al desvelar la grandeza y los talentos que a veces permanecen ocultos en las personas con síndrome de Down, y defiende la necesidad de mantener, por encima de cualquier otra consideración, su hermosa humanidad que está más allá de sus avances estrictamente cognitivos.
Las profesoras Faragher y Clarke nos obligan a perfilar y perfeccionar nuestros métodos de enseñanza y aprendizaje en las personas con síndrome de Down, basándose en los resultados y evidencias que se obtienen a partir de la investigación educativa. Sus advertencias y reflexiones son especialmente oportunas cuando aparece el riesgo del cansancio y el adocenamiento, para mantener el indudable esfuerzo que significa la educación del niño, del adolescente, del joven. De algún modo nos obligan a estar al día en el conocimiento de los avances que se van realizando paulatinamente en el campo del aprendizaje, tal como se manifiesta en el síndrome de Down.
Ante la avalancha de productos que la investigación biológica nos propone como posibles remedios para mejorar algunos aspectos del aprendizaje y de la conducta de las personas con síndrome de Down, sólo hay un modo de determinar convincentemente su posible eficacia: el ensayo clínico correctamente realizado. Los investigadores Fernández y Reeves señalan las principales dificultades que surgen en la práctica para su realización, entre las que destaca la variabilidad interindividual, y proponen la utilización del diseño llamado “en el mismo sujeto”, para mejor determinar la utilidad del producto.
Federica Horta es una persona con síndrome de Down cuyo fenotipo y cognitivo es poco apreciable. Ha tenido que luchar mucho para compensar y superar las dificultades que ella misma apreciaba a lo largo de sus años escolares. Su testimonio vivo, sencillo y sincero, nos emociona, ilustra y enseña a valorar el esfuerzo de cada persona, y a estimar, como ella ha conseguido, los recursos de que disponemos a nuestro alrededor.
Septiembre 2015, nº 126
Volumen 32, páginas 81-120
Sumario
- Moderna investigación educativa en el síndrome de Down (II Parte) (p. 82-95) Down Syndrome Education International
- A propósito de… (p. 96-98) Martha Beck
- Educar a alumnos con síndrome de Down (p. 99-105) Rhonda Faragher, Barbara Clarke
- La práctica del ensayo clínico en el síndrome de Down (p. 106-110) Fabián Fernández y Roger H. Reeves
- Testimonios. Mi testimonio de vida (p. 111-112) PDF
- Resúmenes y comentarios (p. 113-115) PDF
- Libros (p. 118-120) PDF
- Educación postsecundaria en entorno universitario para alumnos con discapacidad intelectual. Experiencias y resultados
- ¿Qué necesitan las familias de personas con discapacidad? Investigación, reflexiones y propuestas
- Mi hermano y yo. La independencia es posible
- Boyfriends + Girlfriends. A guide to dating for people with disabilities
SUPLEMENTO DOWNCANTABRIA, Nº 34
- Memorias de África
- 10 preguntas a… Rosana San Martín, hermana de Abraham
- Un día con… Ramón Martínez
- Un día en… Taller de surf
- Actividades y noticias