La presencia de trastornos del espectro autista en personas con síndrome de Down es una realidad que se aprecia con una frecuencia algo mayor que en el resto de la población. Ciertamente, no se ha de confundir con la aparición de algunos rasgos autistas que a veces surgen a lo largo de su desarrollo; pero en ocasiones el diagnóstico dual de síndrome de Down y autismo se impone. Para los padres es un nuevo motivo de preocupación y desánimo, cuando ya habían encajado y organizado el desarrollo vital de su hijo. ¿Cómo asimilar los sentimientos y extraer de ellos el impulso para encarar el nuevo reto? Sara Hartway, con amplia experiencia como madre e instructora clínica, analiza con delicadeza esta dolorosa etapa de transición y ofrece sugerencias de apoyo y superación que ayuden a los padres y demás familiares a canalizar y encauzar sus decisiones y sus conductas, dentro de sí mismos y en relación con los demás.
En el curso ascendente que marca denodadamente la formación de los niños, adolescentes y jóvenes con síndrome de Down, va abriéndose paso la consideración sobre las múltiples dimensiones que adornan la realidad de su inteligencia. Diana Cabezas aborda de manera muy didáctica y original el desarrollo de una de estas dimensiones: la inteligencia intrapersonal. Y lo hace en referencia concreta y exclusiva a las personas con discapacidad intelectual, con especial referencia y atención al síndrome de Down. Muestra con hechos cómo esa inteligencia está contribuyendo de manera eficiente a su desarrollo personal. Conocerse a sí mismo, gestionar su mundo emocional, y verse protagonista de su planificación y viaje vital son los tres componentes que han de ser trabajados y gestionados a lo largo de las diversas etapas, con el fin de que tan importante dimensión forme parte decidida en el desarrollo y progreso de su inteligencia.
Hay muchas modalidades que se pueden organizar para llevar a cabo la educación escolar del alumno con discapacidad en régimen de inclusión, si de verdad se desea conseguir su integración cabal. Siempre y cuando la escuela y sus agentes —dirección, profesorado, alumnado— la acepten. Pero en último término, es la acción del profesor de la clase o tutor la responsable más determinante. ¿Cómo organizarse para que, con sus propias herramientas y recursos, gestione el ambiente, la praxis, el desarrollo de su ineludible magisterio? Emilio Ruiz, en su permanente preocupación por conseguir una inclusión bien integradora, proporciona al maestro formas de actuación en la clase que sean aplicables al grupo de alumnos en conjunto, de manera que el niño con síndrome de Down sea uno más y que no requiera de ninguna medida diferente, salvo las derivadas de su propio estilo de aprendizaje.
Muy Feliz Navidad y bienvenido el año 2017.
Diciembre 2016, nº 131
Volumen 33, páginas 109-148
Sumario
- El ajuste familiar al diagnóstico de autismo en el síndrome de Down (p. 110-115) Sarah A. Hartway
- Inteligencia intrapersonal y desarrollo en las personas con síndrome de Down (p. 116-130) Diana Cabezas Gómez
- La gestión del aula: Una herramienta para la inclusión del alumnado con síndrome de Down (p. 131-144) Emilio Ruiz Rodríguez
- Resúmenes y comentarios (p. 145-147) PDF
- El síndrome de Down como factor de riesgo para la hospitalización por virus respiratorio sincitial: estudio prospectivo multicéntrico
- Libros (p. 148) PDF
- Respirar por la boca: Consecuencias, prevención y tratamiento
- Nunca más solos: La aventura de Fe y Luz
SUPLEMENTO DOWNCANTABRIA, Nº 38
- “A los más pequeños de los míos”
- Un día con… Elena Lamadrid
- Carta abierta. Quique, hermano de Valvanera
- Actividades y noticias
Desearía recibirla por correo …
Seria posible ..??
¿Se refiere a este número solo o a todos los números? En el primer caso denos su dirección postal. En el segundo deberá suscribirse dirigiéndose a la Fundación Síndrome de Down de Cantabria: admin@downcan.e.telefonica.net.
Se cree que las pruebas de cociente intelectual son inadecuadas para medir la inteligencia de una persona autista, ya que estan disenadas para personas tipicas. Se conocen casos de personas autistas cuyo cociente intelectual cambia drasticamente dentro de un periodo relativamente corto, lo cual probablemente no indica un cambio real en el nivel de inteligencia.