Aunque a veces nos puede dar la sensación de que el mundo educativo español es un desmadre, a tenor de las informaciones, imágenes y experiencias que a diario recibimos, nos sorprenden no pocas veces los intentos y proyectos que generan los responsables de la educación, llenos de sensatez y de interés por el alumnado. En esa línea se encuentra el esfuerzo por facilitar la inserción de los alumnos en el mundo de la escuela, y por suavizarle la llamada transición de una etapa escolar a la siguiente, un paso que con frecuencia resulta conflictivo. Este problema es aún mayor cuando el alumno presenta necesidades educativas especiales. Emilio Ruiz, desde su observatorio como orientador en un equipo de interculturalidad y psicólogo experimentado en niños y jóvenes con síndrome de Down, aborda esta cuestión en el doble frente. Por un lado describe las soluciones que se están implementando ya para el alumnado en general en muchos colegios, y por otro las contrasta con las necesidades propias del alumno con síndrome de Down, y expone con detalle los apoyos que han de prestársele para hacer más aceptables las dificultosas etapas de transición. Padres y maestros encontrarán sugerencias de gran valor práctico.